VIÑETA 489
Como al cadalso
Ya están en la calle muchos carteles de la temporada europea 2023: Valdemorillo,
Olivenza, Castellón, Valencia (Fallas) confirmados; algo de Sevilla, casi, casi
completos los del numeroso San Isidro madrileño, e incluso algunos más avanzados,
Junio (Istres), julio (Ceret), y no…, ni por asomo un matador colombiano en
ellos. Ni por asomo.
¿Porqué? ¿Acaso están vetados? ¿No existen para las empresas? ¿No son alternantes
dignos allá de los consabidos sota, caballo y rey, que repetirán hasta cuatro y
seis veces en la misma plaza? ¿La inminencia de prohibición en marzo por el
congreso aquí, desahucia también a los toreros colombianos allá? ¿O quizá es
que su rentabilidad no da como para solidaridades, reciprocidades, ni devolución
de atenciones?
Bueno, al fin y al cabo, nadie imaginaría que les correspondieran en la
misma medida, carteles exclusivos para ellos, pero sí al menos algún puesto. Por
ejemplo, en la multitudinaria feria de San Isidro, donde van todos. Aunque solo
fuera por guardar apariencias.
No cabría, digamos nuestro primer espada, Luis Bolívar, con trayectoria y méritos
refrendados. Que viene, hace quince días no más, de ganar los trofeos como
triunfador y mejor faena en la feria de Manizales, cortando siete orejas,
indultando un toro, saliendo a hombros en sus dos corridas
Sí,
allí en el mismo ruedo donde Sebastián Castella (francés) reaparecía en
solitario, mientras al otro día se anunciaban El Juli (español) y Roca
Rey (peruano) mano a mano. Sin colombianos en ninguna, tal como acababa de suceder
en Cali el día del cumpleaños de la plaza, 28 de diciembre: Talavante, De
Justo y Roca Rey.
No más
iniciar la encerrona, el matador “Perla Ruiz”, presidente de la Unión de
Toreros de Colombia, UNDETOC, se lanzó como espontáneo en protesta por la
omisión en su propia casa de la torería nacional.
Todo
esto, sucediendo precisamente cuando la fiesta urgida como nunca de
reconocimiento, unidad y solidaridad enfrenta en el país la más feroz arremetida
político-moralista. Pero de inmediato, voces notorias del taurinismo se
levantaron melindrosamente: “Sí, quizá tenga razón, pero esa no es forma de
protestar”.
¿Entonces
cuál es? —Preguntó en un trino el aficionado paisa Mauricio Brand. Sin
respuesta... Los interrogados pasaron callados como los que llevan al cadalso.